Santoral del día 16 de mayo según el Martirologio Romano.
Simón Stock
San Simón Stock fue un religioso inglés de la Orden del Carmelo, nacido en 1161 en Aylesford, Reino Unido.
El día 16 de mayo lo recordamos con ocasión de la efeméride de su fallecimiento, el 16 de mayo de 1265 en Burdeos, Francia.
Simón Stock es uno de los personajes principales de la historia de la Orden del Carmen.
Él fue quien promovió el cambio estructural de la ordena, abandonando el eremitismo y pasando a formar parte del apostolado.
Según la tradición Simón recibió de manos de María el santo escapulario del Carmen, es decir, el hábito de la Orden Carmelita.
La Virgen se presentó portando un escapulario en la mano y dándoselo le dijo: “Toma, hijo querido, este escapulario; será como la divisa de mi confraternidad, y para ti y todos los carmelitas, un signo especial de gracia; quienquiera que muera portándolo, no sufrirá el fuego eterno. Es la muestra de la salvación, una salvaguardia en peligros, un compromiso de paz y de concordia”.
Todos los santos: Santoral 16 de mayo
- En Uzala, en África (hoy El-Alia, en Túnez), conmemoración de los santos Félix y Genadio, mártires (s. inc.).
- En Ósimo, en la región del Piceno, en Italia, santos Florencio y Diocleciano, mártires (s. inc.).
- En Persia, santos Abdas y Abieso, obispos y mártires, que fueron inmolados en tiempo del rey Sapor II, junto con treinta y ocho compañeros (375-376).
- En el lugar de Bouhy, del territorio de Auxerre, en la Galia, san Peregrino, mártir, venerado como primer obispo de esta ciudad (s. IV/V).
- Conmemoración de san Posidio, obispo de Calama, en Numidia (hoy Guelma, en Argelia), discípulo y amigo fiel de san Agustín, quien le asistió en su muerte y escribió su admirable vida (c. 437).
- En Troyes, en la Galia Lugdunense, san Fídolo, presbítero, de quien se narra que fue capturado por el rey Teodorico cuando devastaba Auvernia, pero fue liberado e instruido en el servicio divino por el abad san Aventino, al que sucedió (c. 540).
- En Irlanda, san Brendán, abad de Clonfert, diligente propagador de la vida monástica, del cual se cuenta una navegación fabulosa (577/583).
- En Amiens, de Neustria, san Honorato, obispo (c. 600).
- En Bretaña, san Carentoco, obispo y abad de Cardigan (s. VII).
- En Palestina, martirio de cuarenta y cuatro santos monjes despedazados por los sarracenos que irrumpieron en la laura de San Sabas, en la época del emperador Heraclio (614).
- En Toulouse, en Aquitania, san Germerio, obispo, que se afanó en extender el culto de san Saturnino y en asistir al pueblo que se le había confiado (s. VII).
- En Gubbio, de la Umbría, san Ubaldo, obispo, que se entregó a la labor de reformar la vida común de los clérigos (1160).
- En Fermo, del Piceno, en Italia, san Adán, abad del monasterio de san Sabino (c. 1210).
- En Burdeos, en Gascuña, san Simón Stock, presbítero, que primero fue ermitaño en Inglaterra y después ingresó en la Orden de los Carmelitas, la cual rigió admirablemente, siendo célebre por su devoción singular a la Virgen María (1265).
- En Janow, cerca de Pinsk, junto al río Pripet, en los confines de Polonia, san Andrés Bobola, presbítero de la Compañía de Jesús y mártir, que se esforzó de forma activa por la unión de los cristianos hasta que, habiendo sido capturado por unos soldados cosacos, dio gustosamente con su sangre el supremo testimonio de la fe (1657).
- Cerca de Munich, en Baviera, en Alemania, beato Miguel Wozniak, presbítero y mártir, el cual, habiendo sido llevado desde la sometida Polonia al campo de concentración de Dachau, bajo un régimen hostil a la dignidad humana y a la religión emigró entre torturas a la gloria celestial (1942).
- En la ciudad de Drohovych, en Ucrania, beato Vidal Vladimir Bajrak, presbítero de la Orden de San Josafat y mártir, que ante los perseguidores de la religión adquirió el fruto eterno por medio del combate de la fe (1946).